20 mar 2012

Optimizar un disco SSD en Windows 7

OCZ OCTANE_2012-robi_wm  

 

A la hora de obtener información sobre un SSD, la Web y las opiniones de los usuarios se vuelven un recurso invaluable, pero por más buenas recomendaciones que pueda tener una unidad, igualmente tendremos que realizar algunas optimizaciones propias al cambio de hardware, para que nuestra compra rinda al máximo.

1) Actualización de firmware

Un paso más que recomendado apenas instalas un SSD es buscar si es necesaria una actualización de firmware. Los fabricantes están trabajando muy duro para optimizar el rendimiento de sus productos, pero fundamentalmente para corregir bugs que pueden causar serios problemas (comenzando con la pérdida de información). Esto revaloriza en gran medida la actualización de firmware comparada con la situación de los discos duros convencionales, en los que dichas actualizaciones son muy poco frecuentes.

Los fabricantes ofrecen recomendaciones e instrucciones precisas para actualizar el firmware en sus SSD. Recuerda que es una operación delicada.

2) Puertos SATA en modo AHCI

Tras la instalación del SSD (y antes de instalar el sistema operativo) es verificar en el BIOS que estás utilizando tus puertos SATA en modo AHCI y no en modo de compatibilidad IDE.

 

3) Actualizar los controladores para el chipset de la placa base 

Buscar una actualización de los controladores para el chipset de la placa base, algunos de ellos pueden asistir en gran medida al rendimiento de un SSD.

 

4) Comando TRIM

Y así llegamos a Windows 7. ¿Por qué Windows 7? Porque Microsoft aplicó optimizaciones muy específicas para unidades de estado sólido. Una de ellas es TRIM, un comando que a partir de aquí se convertirá en tu mejor amigo. No sólo quieres un SSD que soporte TRIM, sino que también quieres un sistema operativo que soporte TRIM. En términos simples, cuando borras algo, sigue estando allí, solo que no puedes verlo. Para un disco duro esto no representa un problema mayor, ya que un bloque es reportado como “libre” a pesar de su contenido, y se lo sobrescribe directamente, pero en un SSD, los bloques son “marcados para borrado”, y primero hay que borrarlos para poder escribir después (dos operaciones, cuando quieres una). Esto hace que la velocidad de escritura de un SSD, con el paso del tiempo y el aumento de las operaciones, literalmente se caiga a pedazos. Ahí es en donde entra TRIM, haciendo saber que cuando un bloque es “marcado para borrado”, sea purgado.

Ahora, ¿TRIM es bueno? Sí, TRIM es bueno. ¿TRIM es perfecto? No, no lo es, ya que en realidad combate un efecto negativo, pero no puede eliminarlo. Algunos fabricantes aplican en los controladores de sus SSD sistemas de “recolección de basura” que hacen un trabajo similar a TRIM, pero si el SSD soporta TRIM, y el sistema operativo también (no es exclusivo de Windows 7), estás en buen camino. Para confirmar que TRIM está funcionando en Windows 7, abre una consola en modo Administrador, y escribe: “Fsutil behavior query disabledeletenotify”, sin las comillas. Si el resultado es 0, TRIM está listo para ser usado. Caso contrario, el comando para intentar activarlo es: “fsutil behavior set DisableDeleteNotify 0”. Si después de ese comando el valor sigue siendo diferente a 0, puede que el SSD no soporte TRIM, o que requiera una actualización de firmware.

 

5) Desactivar algunas funciones innecesarias en unidades SSD

¿Cómo determina Windows 7 si un disco es de estado sólido? Fácil: Preguntando a la unidad su velocidad de rotación, si el valor es 0 (no hay partes mecánicas en un SSD), la unidad es de estado sólido.

¿Qué provoca esto? Que Windows 7 desactive automáticamente varias funciones que de otra forma son consideradas importantes para su funcionamiento, como la ReadyBoost, desfragmentación y SuperFetch:

El caso de ReadyBoost ya es ciertamente irrelevante. Obtener un pendrive que aproveche al máximo a ReadyBoost cuesta lo mismo que un módulo de memoria, por lo que es más lógico agregar RAM, salvo que las opciones de expansión sean muy limitadas.

Cortar la Desfragmentación es lógico: Un SSD no tiene partes internas, por lo tanto, los efectos negativos de la fragmentación no se aplican aquí. Desfragmentar un SSD ni siquiera califica como un placebo: Puede ser malo para la unidad. Volverás loco al TRIM, a la recolección de basura, y aumentarás el desgaste en los bloques innecesariamente.

El caso de SuperFetch es un poco más complicado de explorar...

Hagamos un poco de memoria: SuperFetch es una función de pre-carga que arroja en memoria RAM el software y las funciones que son más utilizadas por el usuario. SuperFetch asume dos cosas: Que los discos duros son lentos, y que la memoria no usada es en realidad memoria desperdiciada (tiene razón en ambos casos). Entonces, ¿por qué no tomar software del disco duro, precargarlo en memoria, y cuando el usuario lo requiera, acceder directamente desde la memoria en vez de ir al disco duro? Esto tiene sentido, siempre y cuando hablemos de discos convencionales. Con un SSD, los tiempos de acceso son tan cortos y las velocidades de lectura tan potencialmente altas, que el rol de SuperFetch pierde sustancia. Ante la presencia de un SSD, Windows 7 desactiva SuperFetch cambiando eficiencia por eficacia.

Otra cosa que Windows 7 desactiva es ReadyDrive, pero esa es una función exclusiva para los discos híbridos, de los cuales hay muy pocos en el mercado.

Deshabilita SuperFetch, Desfragmentador de Disco, y Búsqueda de Windows

Hasta aquí, parece que el mismo Windows 7 hace todo el trabajo pesado, pero nosotros podemos aportar algún grano de arena. En primer lugar, podemos verificar que los servicios de SuperFetch y el Desfragmentador de Disco interno de Windows queden detenidos de forma permanente. Sólo es necesario ir a “Servicios” dentro de“Herramientas Administrativas”, buscar los servicios, y cambiar su estado a“Deshabilitado”, que se hará efectivo al siguiente reinicio.

Y ya que estás allí, deshabilita el servicio de “Búsqueda de Windows”. Este servicio se encarga del famoso indexado para búsqueda de archivos que sembró caos y dolor entre los usuarios de Windows Vista. Una vez más, los tiempos de acceso de un SSD son tan cortos que indexar archivos es redundante. El índice puede ser desactivado en cada unidad a través de sus propiedades (Ve a “Equipo”, clic sobre la unidad con el botón secundario, y escoge “Propiedades”), pero interrumpir el servicio es más rápido.

 

6) Cambiar el perfil de administración de energía

Lo mas recomendable es colocar al perfil de administración de energía en alto rendimiento, para que no coloque en espera al SSD. En realidad, esto tiene cierto matiz opcional. Si ahorrar energía es la máxima prioridad (en ordenadores portátiles), deja que Windows 7 lo administre, pero permitir que el SSD opere extiende los períodos de recolección de basura, algo beneficioso a la hora de realizar operaciones de escritura.

 

7) El caché de escritura en la unidad SSD 

activar (o como muchos recomiendan, desactivar) el caché de escritura en la unidad SSD. Se trata de una política de Windows, no exclusiva de SSDs, ya que puedes encontrarla en discos duros también. La configuración por defecto es el caché de escritura activado, al igual que su purga. Y después de algunas pruebas e intercambiar información con otros usuarios, debo recomendar que eso se quede como está, ya que más allá de alguna leve diferencia en latencia en favor del caché de escritura activado, el resultado de los benchmarks cae dentro del margen de error.

 

8) Desactivar el archivo de hibernación. 

Proceso sencillo: Consola en modo administrador, y el comando es: “powercfg -h off”.

Si intentas desactivar la hibernación como usuario normal, recibirás un error.

 

9) Desactivar Restaurar Sistema

Ahora llegamos a si debes desactivar o no elementos como “Restaurar Sistema”. MI opinión es Desactivar “Restaurar Sistema”  esto libera recursos generales, reduce operaciones de disco, ahorra espacio de la unidad SSD, además si entra un virus lo primero que hace es destruir el sistema de restauración de Windows, o estará inaccesible si no arranca Windows, así que prefiero hacer un backup de imagen de disco completo cada cierto tiempo y guardarlo en otra unidad que puede ser un disco duro de alta capacidad, por ejemplo con Acronis True Image, o programas gratuitos como Macrium reflect free edition, Easeus Todo Backup

 

10) La memoria virtual

En cuanto a la memoria virtual, el factor crítico es la memoria RAM instalada. No recomiendo desactivar la memoria virtual a menos que poseas 8 GB o más de RAM. Nadie quiere mensajes de error por falta de memoria física, ni siquiera los dueños de un SSD.

Desactivar la memoria virtual puede ser muy tentador, pero si no hay RAM suficiente, tendrás problemas

 

11) Desactivar el “Prefetcher”

Para finalizar, lo único que nos queda por hacer es desactivar el “Prefetcher”. Muchos sitios indican que el Prefetcher y SuperFetch son lo mismo, pero si bien tienen algunos elementos en común, esto no es del todo cierto.

SuperFetch precarga aplicaciones en memoria para un acceso más veloz, mientras que el Prefetcher genera “archivos de rastreo” para aumentar la eficiencia de acceso a los archivos relacionados al inicio de Windows y la ejecución de ciertas aplicaciones.

El reducido tiempo de acceso de los SSD vuelve a jugar a favor aquí, por lo tanto, el “Prefetcher” ya no es tan útil.

Deberás ir al Registro, y hacer una visita a la cadena

HKEY_LOCAL_MACHINE\SYSTEM\CurrentControlSet\Control\Session Manager\Memory Management\PrefetchParameters”,

y cambiar el valor de “EnablePrefetcher” a 0.

EnablePrefetcher en 0, y reinicia

Conclusión

Colocar una unidad SSD como unidad primaria o unidad C:  es como cambiar la PC, por otra PC ultra rápida, Créeme cuando te digo que en el momento en el que veas funcionar a una unidad de estado sólido (SSD) al mismo tiempo que recuerdas la espera requerida por tu disco duro previo, será como salir de la caverna.

Algunos seguimos utilizando el término DISCO por costumbre, pero ya debemos llamarla UNIDAD de estado sólido.

¿qué tanto rendimiento extra obtendrás de todo esto? Aquí solamente estamos puliendo algunos puntos propios del nuevo hardware, haciendo un poco mejor lo que por naturaleza propia es extraordinario.

Si solamente vas a usar 1 SSD, sólo queda disfrutarlo. Pero si estará acompañado por un segundo disco duro convencional para guardar datos, recuerda que ese disco duro seguirá necesitando de su desfragmentación periódica, algo que puedes lograr con cualquier desfragmentador externo.

Las unidades SSD y la interface Thunderbolt de fibra óptica, creo que son las dos mejores tecnologías que mejoran enormemente la velocidad de funcionamiento de cualquier computadora

¡Buena suerte!

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Muchas gracias, instalé uno el viernes pasado y el artículo me fue de mucha ayuda.